Su carrera literaria empieza a edad muy temprana, de hecho, en esta etapa de su primera juventud su inclinación a la poesía es una herramienta necesaria para su expresión y desenvolvimiento en la sociedad, en la vida y el amor. Es un permanente contacto con la nostalgia, la tristeza y el llanto, según él, ocasionado por el abandono de las entrañas que lo vio parir.
Odas para Emma es su segundo poemario, un excelente compilado lleno de ternura, amor y desventura, de ilusión, inclusive de esperanza.
Elegía para Ángela, es su primer libro.
En la actualidad Felipe Santos vive en entre Kakiabamba y Andahuaylas, siempre, desde luego, escribiendo. Rabahan, será sui próxima publicación.
Enciso Altamirano
Algunas prosas de Odas...
Que va, un hombre no llora;
Pero qué estoy diciendo, si estoy llorando;
Me pagó mal, su amor me pagó mal;
Solo espero que me quisiera con el alma.
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Ay, amor de mujer
Así nos ilusionan
Y nos frustran;
Nos eleva y nos desciende
Nos consuela y nos lastima
Nos cura y nos envenena.
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De aquel árbol que cruza sus ramas
reposando el mustio amanecer;
te recordarás de mis ausentes pasos
que hoy andan otros caminos.
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Yo no sé si luchamos contra el viento
o es la marea en contra de nosotros;
sólo sé que al cerrar los ojos sueño
con un día después de las tormentas.
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Cuando diciéndome te amo me besas,
a tí, te doy mis ganas de vivir
para vivirlo eternamente sin desistir
al lazo en que nos fundimos los dos.
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